Ichi, Mich, Dichi y Tichi son
cuatro gatitas hermanas, amorosas y encantadoras, pero cuando se juntan… hacen
cosas increíbles. Como lo que hicieron este verano con su prima Anagata de
Córdoba. Anduvieron en bici, nadaron en la piletita de lona…
Les cortaron el pelo a las
muñecas, armaron collares de fideos…osea, de todo para divertirse. Pero tenían ganas
de algo más y pensaron en hacer algo rico. “¡Tengo una idea!-dijo Anagata- “¡Hagamos
pororó!”
Dentro de la olla comenzaron unas
fuertes explosiones. La abuelita levantó un poquito la tapa para espiar y
entonces se dio cuenta de que pasaba algo raro. Y antes de que pudiera preguntarles
a sus nietas, la olla se destapó y desde adentro salió una catarata blanca y
esponjosa.
Todas quedaron tapadas de
pochoclos. Sólo asomaban las cabecitas y las puntas de las colas. De pronto
Ichi preguntó: “¿Le ponemos azúcar o sal?”. Y entonces la abuela dijo: “dulce o
salado, pochoclo o pororó, conozco unas gatitas que van a estar barriendo un
largo, largo rato”.
FIN
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